‘También mi nombre se lo llevará el río’ de Rafael Abolafia y Javier Parra. Central de Actuantes

Central de Actuantes, Teatro/Conciertos

Venta de entradas

Sala 014

 

TAMBIÉN MI NOMBRE SE LO LLEVARÁ EL RÍO

Sinopsis
También mi nombre se lo llevará el río es una experiencia performativa sobre la identidad. Una invitación a la presencia viva, a dejarnos llevar por el azaroso carácter de la búsqueda, sin miedo a que las cosas se nos escapen de las manos. En esta creación confluyen elementos de land artFluxus, la plástica escénica del arte de acción, el audiovisual y el lenguaje de los objetos.
Permanece en la puerta si anhelas la belleza. Abandona el sueño si quieres entrar.
Unas palabras de Rafael Abolafia

También mi nombre se lo llevará el río es una experiencia performativa sobre la identidad. Una invitación a la presencia viva, a dejarnos llevar por el azaroso carácter de la búsqueda, sin miedo a que las cosas se nos escapen de las manos. En esta creación confluyen elementos de land art, Fluxus, la plástica escénica del arte de acción, el audiovisual y el lenguaje de los objetos. Permanece en la puerta si anhelas la belleza. Abandona el sueño si quieres entrar.

También mi nombre se lo llevará el río es una pieza viva, en constante movimiento. Ni siquiera tengo la certeza de que al terminar de escribir este texto el impulso que me llevó a concebirlo siga vigente. Lo que sí respira como una luz en la oscuridad de este bosque es la honestidad con la que siempre afrontamos este proceso: una continua exploración en búsqueda de nuestras voces como individuos y como creadores, de un lenguaje escénico que anhela ser flexible e integrador, humilde, que incorpore nuestro ser contemporáneo, desde lo íntimo y hasta lo periférico.

Presentar y vivir, no interpretar. No contar desde fuera, sino desde dentro.

En el devenir de los meses de laboratorio creativo, nos ha atravesado la mística sufí, la utopía, la síntesis inefable de los haikus japoneses, la estética antropoarboriforme, y nos hemos acercado cada vez más a una experiencia fluxus. He descubierto con mi compañero de escena Javier Parra, con el resto del equipo (TAMA, Diego, Laura, Reyes) y con un buen puñado de amigos y nuevos amigos (María L, Francisco, Jesús, Ales, Palen, Valero, Paula, Lola, entre tantos otros), que se puede generar una narrativa personal a partir de la reflexión y la investigación, escuchando y sintiendo al otro. Y que, como decía Cocteau, al final “lo consiguieron porque no sabían que era imposible”. Desconozco cuál será el resultado ni su impacto; sí deseo que un viaje poético, liberador, interrogante, introspectivo. ¿Destruirse o renacer? Quizás un río que se llevará todos nuestros nombres.

Venta de entradas



}